CARTAS A MI AMIGA DIANA
Rosina Valcarcel
1. VIENTO
a Diana Ávila
Flota en el aire libre
Una mujer desnuda de espaldas al cielo
Sus ojos egipcios han vuelto
Al fértil árbol
A la tierra del trigo y uva
Al lago irisado
Los espejos oblicuos
Tu cuello capulí / el rubor
Tu cabellera de orquídeas
Enigma, melodía
Donde el oboe vibra
Respiras al atardecer
Y nos fecunda el viento
El aroma del pino
Una taza humeante de café
Torrente de existencia
Abrimos las manos al mundo
Cerca a la playa La Punta
Hieren nuestros cuerpos silvestres
Somos libertad / alas de golondrina
Al fin, menos batalla
Brisa, refugio, esperanza
Contradanza, Fondo Editorial Cultura Peruana, Lima, 2013, pp. 45-46
2. NOSOTRAS
a Diana Ávila
-El tranvía echa humo azafrán
—Lima es una presa que sangra, dijiste.
Si esta tarde lloviera hasta las diez
El río Chillón no duraría bajo el cielo
Ni el fervor de Octubre en nosotras
Flores de los vientos
Esperamos al hombre nuevo
A la mujer y al espejismo
Fulgor del poniente
La mar, la tierra, la vida
Entre el tabaco y el pisco aquel fugitivo se lleva
un trofeo
Pensamos en los otros / Víctimas de la filosofía
Del cristianismo / de Erich Fromm /
Del humanismo
De Marx
Hablo por la mujer / Hay eco / Resplandor vivo
Una existencia Un soplo Silencio de las nubes
Al margen de la esfinge: exaltadas
Cómo revelar el estado de nuestro cuerpo
de nuestra mente
Exponer nuestra ropa raída
Las tardes salobres
Los zapatos rotos
En nombre de la ética subversiva
Nuestra soledad se borra
Nuestro espíritu gira
Los huesos resucitan
La madreselva se entona
Tu frente se ruboriza
La tierra es un misterio
El presente lo atestigua
De Versos para colgar en la pared, Lima, 2016, pp. 93-94
30 enero 2016
3. PERÚ
Y no sabremos nunca, en esta vida, si la noche que entró,
por tu ventana es la misma mañana que entrará, por la mía
Calvo-Basagoitia
Las aves de paso nos largamos por la ventana
Si habitaras en Perú, explicaría la palabra exilio,
amor Señales como caos, pasión, fuego, soledad
Palabras sin borde ni apego
Sin patio verano maíz ni vicuñas
En el paraje remoto donde moran tus labios
Viento en popa En Fiestas Patrias
César desfila en la Plaza Mayor
Gladys da una ojeada celeste
Erasmo lleva escarapela en su uniforme
Víctor Raúl y Joao prueban
mondonguito a la italiana
Kaku, salobre de sombras
Habla con Patricia
De la bella Amazonía
De los arbustos fecundos
De las revueltas campesinas y los cumpas
Y Diane envuelve a las orquídeas
Pero la patria se hunde
En los restos de un bello cuadro.
Versos para colgar en la pared, Horizonte, 2016, pp. 111
4. La carta que no se envió
a dos voces, sobre la vida, para Diana
Gladys Acosta y Rosina Valcárcel
--Genoveva: -Eres bella como la luna y el sol juntos
--Rosamar: -Oh, gracias, amiga maravillosa
a Diana Ávila
-El tranvía echa humo azafrán
—Lima es una presa que sangra, dijiste.
Si esta tarde lloviera hasta las diez
El río Chillón no duraría bajo el cielo
Ni el fervor de Octubre en nosotras
Flores de los vientos
Esperamos al hombre nuevo
A la mujer y al espejismo
Fulgor del poniente
La mar, la tierra, la vida
Entre el tabaco y el pisco aquel fugitivo se lleva
un trofeo
Pensamos en los otros / Víctimas de la filosofía
Del cristianismo / de Erich Fromm /
Del humanismo
De Marx
Hablo por la mujer / Hay eco / Resplandor vivo
Una existencia Un soplo Silencio de las nubes
Al margen de la esfinge: exaltadas
Cómo revelar el estado de nuestro cuerpo
de nuestra mente
Exponer nuestra ropa raída
Las tardes salobres
Los zapatos rotos
En nombre de la ética subversiva
Nuestra soledad se borra
Nuestro espíritu gira
Los huesos resucitan
La madreselva se entona
Tu frente se ruboriza
La tierra es un misterio
El presente lo atestigua
De Versos para colgar en la pared, Lima, 2016, pp. 93-94
30 enero 2016
3. PERÚ
Y no sabremos nunca, en esta vida, si la noche que entró,
por tu ventana es la misma mañana que entrará, por la mía
Calvo-Basagoitia
Las aves de paso nos largamos por la ventana
Si habitaras en Perú, explicaría la palabra exilio,
amor Señales como caos, pasión, fuego, soledad
Palabras sin borde ni apego
Sin patio verano maíz ni vicuñas
En el paraje remoto donde moran tus labios
Viento en popa En Fiestas Patrias
César desfila en la Plaza Mayor
Gladys da una ojeada celeste
Erasmo lleva escarapela en su uniforme
Víctor Raúl y Joao prueban
mondonguito a la italiana
Kaku, salobre de sombras
Habla con Patricia
De la bella Amazonía
De los arbustos fecundos
De las revueltas campesinas y los cumpas
Y Diane envuelve a las orquídeas
Pero la patria se hunde
En los restos de un bello cuadro.
Versos para colgar en la pared, Horizonte, 2016, pp. 111
a dos voces, sobre la vida, para Diana
Gladys Acosta y Rosina Valcárcel
--Genoveva: -Eres bella como la luna y el sol juntos
--Rosamar: -Oh, gracias, amiga maravillosa
--Somos las amazonas que vengarán a su kamarada
Y a su Tribu del humo impuro y de la adversidad
No somos varones y nuestra cabalgadura relampaguea
La rosa de sangra ha de calmarse
Lidiando, remediamos el dolor de nuestra amiga
Subimos hacia el monte, el vendaval cambia su traje leve
Y su voz se aclara y salimos de las sombras
La lluvia tiene la forma lunar y el color del océano Pacífico
Oímos esta narración de plata y sangre, agonía y resurrección
Bienamadas, a la hora del viento vendrán lágrimas doradas
y viajaremos a través del Oceáno azul cobrizo
No más noticias ácidas / Ni tristeza
Al fondo de la patria, al atardecer un canto leve pueda revelar
La defensa de los derechos humanos
El vuelo de las pajaritas que caen sobre la tierra condenada
Sublimes ámbares / Pureza desarmada / Pasión ardiente
La ira de Enero / La orilla del verano / Nuestra hora el mañana
Amor se desnuda y cultiva claveles rojos
¿Dónde estás, gaviota herida?
¿En México o en Colombia?
Son tres sombras, cuatro sombras azules
Que palpitan y renacen sobre la campiña
Vuestros cuerpos de quinua en la tierra
El tórrido color de las cabelleras frescas
Nuestras risas hechas polvo enamorado
El pasado que nos separa de la muerte
Estamos picando rocas al filo del vacío
Amadas, en Lima se ha esfumado el olor del verano
(Hermanas el río las abraza sobre las piedras negras).
•24/01/2015 (inédito)
5. AUGURIO /
a Diana Ávila
eres la adarga que el gentío ha de ver
r.v.
Oh tú, esencia mía, la inmortal entre las diosas
Estás al tanto y tienes potestad
Estas son las manos que el siglo XXI exige
El relámpago está quieto en mi brazo
Y un día tendrá que exterminar
Verás entonces su albor azulino
Y acertarás Únicamente entre miles
Las otras menos enérgicas
Eres la naturaleza y el collar que vincula
Eres la adarga que el gentío ha de ver
Lima, Jueves, 4 de junio de 2015
(antes del natalicio de D.)
Y a su Tribu del humo impuro y de la adversidad
No somos varones y nuestra cabalgadura relampaguea
La rosa de sangra ha de calmarse
Lidiando, remediamos el dolor de nuestra amiga
Subimos hacia el monte, el vendaval cambia su traje leve
Y su voz se aclara y salimos de las sombras
La lluvia tiene la forma lunar y el color del océano Pacífico
Oímos esta narración de plata y sangre, agonía y resurrección
Bienamadas, a la hora del viento vendrán lágrimas doradas
y viajaremos a través del Oceáno azul cobrizo
No más noticias ácidas / Ni tristeza
Al fondo de la patria, al atardecer un canto leve pueda revelar
La defensa de los derechos humanos
El vuelo de las pajaritas que caen sobre la tierra condenada
Sublimes ámbares / Pureza desarmada / Pasión ardiente
La ira de Enero / La orilla del verano / Nuestra hora el mañana
Amor se desnuda y cultiva claveles rojos
¿Dónde estás, gaviota herida?
¿En México o en Colombia?
Son tres sombras, cuatro sombras azules
Que palpitan y renacen sobre la campiña
Vuestros cuerpos de quinua en la tierra
El tórrido color de las cabelleras frescas
Nuestras risas hechas polvo enamorado
El pasado que nos separa de la muerte
Estamos picando rocas al filo del vacío
Amadas, en Lima se ha esfumado el olor del verano
(Hermanas el río las abraza sobre las piedras negras).
•24/01/2015 (inédito)
a Diana Ávila
eres la adarga que el gentío ha de ver
r.v.
Oh tú, esencia mía, la inmortal entre las diosas
Estás al tanto y tienes potestad
Estas son las manos que el siglo XXI exige
El relámpago está quieto en mi brazo
Y un día tendrá que exterminar
Verás entonces su albor azulino
Y acertarás Únicamente entre miles
Las otras menos enérgicas
Eres la naturaleza y el collar que vincula
Eres la adarga que el gentío ha de ver
Lima, Jueves, 4 de junio de 2015
(antes del natalicio de D.)
6. ¿EL AMOR ELIGIÓ SU GUARIDA?
a Diana Ávila
El navío cómplice trota la tarde sin extremos
Rodando bajo las lluvias sin base ni signo
En el cascarón azabache del universo
Las casitas fueron añadidas mirando al Oeste
casi a 100 metros del Océano Pacífico
sobre desnudas arenillas tangibles
¿El amor eligió su guarida?
La nube enlaza Una carga de volantes desheredados
Ahí, Diana, en el inicio del esplendor marino
Cuatro aves ansiosas y erizadas no sueltan la barcaza.
Lima, 11: 30 p.m, sábado, 24
de enero de 2015
a Diana Ávila
El navío cómplice trota la tarde sin extremos
Rodando bajo las lluvias sin base ni signo
En el cascarón azabache del universo
Las casitas fueron añadidas mirando al Oeste
casi a 100 metros del Océano Pacífico
sobre desnudas arenillas tangibles
¿El amor eligió su guarida?
La nube enlaza Una carga de volantes desheredados
Ahí, Diana, en el inicio del esplendor marino
Cuatro aves ansiosas y erizadas no sueltan la barcaza.
Lima, 11: 30 p.m, sábado, 24
de enero de 2015
7. CARTA A DIANA
Mi querida Diana
Me acuesto pensando / Me levanto pensando en ti
No importó atesorar las bodas a toda costa
La plata pálida del invierno nos da frío
Todo tiembla Y sobrevivimos a media luz
Es posible ir más allá de lo real
Tu cuerpo no se desmorona
Tu cuerpo protesta
Mi universo desmaya
Mi corazón te susurra
No abandonamos las chozas
Cuando el fuego las envuelve
Te llevo en un navío por otra ribera
Estamos en la Amazonía y no te consumes
El pequeño cocodrilo juega con nosotras
Hemos vivido en un lugar errado
Sobre laderas de tierra estéril
Pronto cantará el totí
En medio de un vasto mundo fértil
Y estará el cielo despejado. Y tu sonrisa bajo la Luna de cuarzo
Domingo, 26 de junio de 2016
Mi querida Diana
Me acuesto pensando / Me levanto pensando en ti
No importó atesorar las bodas a toda costa
La plata pálida del invierno nos da frío
Todo tiembla Y sobrevivimos a media luz
Es posible ir más allá de lo real
Tu cuerpo no se desmorona
Tu cuerpo protesta
Mi universo desmaya
Mi corazón te susurra
No abandonamos las chozas
Cuando el fuego las envuelve
Te llevo en un navío por otra ribera
Estamos en la Amazonía y no te consumes
El pequeño cocodrilo juega con nosotras
Hemos vivido en un lugar errado
Sobre laderas de tierra estéril
Pronto cantará el totí
En medio de un vasto mundo fértil
Y estará el cielo despejado. Y tu sonrisa bajo la Luna de cuarzo
Domingo, 26 de junio de 2016
Revista Libre Pensamiento, muy agradecida por la grata sorpresa: la edición y difusión de mis Cartas-poemas a la compañera Diana Ávila. Siento doble satisfacción
ResponderEliminarpor ser un medio de Nicaragua y por ser los textos inspirados en mi relación fraterna con la camarada Diana. Abrazos joviales. Parabienes. Desde Lima, Perú.