Jueves,
4 de diciembre de 2014
Kim
Jong-un pone a Hollywood contra la pared
HACKERS
NORCOREANOS LANZAN A LA RED CINCO PELICULAS YANQUIS SIN ESTRENAR
Hace
unos días los estudios cinematográficos de la Sony Pictures
Entertainment, en California, sufrieron un
masivo ataque informático cuyo resultado fue el hackeo de cinco peliculas
cuyo estreno aún no se había producido. Como se sabe, los estrenos en Hollywood forman
parte esencial en el lanzamiento de los films. Un auténtico enjambre de
negocios giran alrededor de ese momento crucial, cuyo objetivo primordial
consiste en que la película producida pueda generar suculentos
negocios a través de la propaganda que de ella se hace en esos eventos.
Según
informaron diversas agencias de prensa, "cinco de los
películas más esperadas están circulando por Internet, entre ellas Fury, película
protagonizada por Brad Pitt y Shia LaBeouf. Los
otros cuatro films son Annie, con Cameron Diaz, Mr.
Turner, de Mike Leigh, Still Alice protagonizada por Julianne
Moore, Kristen Stewart, y "To Write Love on Her
Arms". Según Los Angeles Times los
ciberatacantes se identificaron como GOP Guardians of Peace
-Guardianes de la paz- y amenazaron con hacer pública información
de los servidores de Sony Pictures".
Las
películas en cuestión todavía no se habían estrenado y se encontraban justo en
la antesala de ese momento. Al parecer, sólo existían copias para su uso
en diferentes festivales cinematográficos que promocionan este tipo de
lanzamientos.
La irritación
en la empresa Sony ha alcanzado alturas estratosféricas.
Sus portavoces han calificado el lanzamiento pirata como un “asunto
criminal”.
Los
grandes medios estadounidenses atribuyen este ataque cibernético a la República
Popular de Corea del Norte. Y, en efecto, hay razones
suficientes para pensar que los hackers norcoreanos se han
cobrado su parte una revancha contra la instrumentalización política que
realiza esa empresa mediatica con sus producciones .
El
conflicto tiene su origen en que este mismo mes de diciembre se estrenará la
comedia "The Interview", un
film típico de propaganda política yanqui, en cuyos objetivos de ataque suelen
estar la revoluciones políticas latinoamericanas, los árabes, los rusos y los
chinos. En
esta película, dos periodistas estadounidenses, cuyos papeles desempeñan los
actores James Franco y Seth Rogen, consiguen una entrevista con el
joven presidente norcoreano Kim Jong-un. Los servicios de
inteligencia norteamericanos - la CIA- los persuade para que
aprovechando la ocasión, procedan a ejecutar el asesinato del presidente de esa
República Popular asiática.
Con
toda la razón, las autoridades de Pyongyang formularon una
protesta ante la ONUpor el estreno de esta película, estimando que
se trataba de un acto de guerra condenado por el derecho internacional.
Paralelamente aseguraron que tomarían las represalias debidas si ese
film, que lo consideraban una incitación al asesinato, llegaba a ser
exhibido. Como ahora puede constatarse, los primeros indicios de aquella
promesa han empezado a cumplirse.
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