PASEO MOJADO
Alain Pallais
Astillas húmedas e infinitas
caen verticales desde el domo
hoy gris, sin manchas.
Contactan al bosque en mi cabeza
lo inundan, bañan.
Una efímera luz en el techo.
Un atroz fragor en el oído.
Susto de aves.
Astillas húmedas e infinitas
chocan con las agrietadas calles
de mi semblante,
del rostro montoso en las ventanas,
en los semáforos
hoy parpadeantes
sin transeúntes.
El claxon y la fricción de llantas
Anuncian al metal retorcido.
Espanto, gritos.
Un frío lago llevo en mis ropas.
Mi envoltura se arruga, no siente.
Tropiezo con temblores y charcos,
con la vergüenza,
con el desprecio.
El paraguas de iguales noticias
se desmorona
frágil sobre el bosque en mi cabeza.
Confeti húmedo e infinito
cae sobre el jardín de mi entrada.
He regresado.
Mi techo el puente,
mi jardín.......yo.
Así dormimos.
Todo un diseño arquitectónico de la palabra. Versos que van más allá de medidas, utilizando como fundamento el vacío de la miseria humana y que en ningún momento desentonan con la belleza del poema.
ResponderEliminarMarina Moncada