Invitación al poeta a que se deje visitar
Raul Orozco
Son como garrapatas.
Son como piojos.
Son como pulgas.
Sanguijuelas son.
Todos quieren chuparte
la sangre, poeta.
Pero de nada les valdrá.
Nunca hubo, que sepamos,
ósmosis con la poesía;
menos transfusiones
desde los vivos a los muertos.
Cuando mucho hay tolerancia,
comprensión de su mudez verbal,
tristeza por el vástago que no sube de la tierra;
por el que no es sal de la tierra,
ni sombra.
Poco añadirán, Carlos, al mundo sus chirridos
y porque no les tocas
ni te tocan, comprendé, poeta,
comprendé.
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Gentileza de Evelyn Martínez
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