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lunes, 2 de julio de 2012

Dos izquierdas honestas pero diferentes

Dos izquierdas honestas pero diferentes
Rómulo Pardo Silva


Hay definiciones importantes que adoptar, son urgentes… oponerse a la expansión militar ordenadas por los multimillonarios de las corporaciones; entregar los bienes y servicios de que carecen los millones de pobres; presentar el socialismo como proyecto necesario; defender el medio ambiente.

Esto se puede tratar de hacer por dos caminos que requieren valentía y que excluyen a los llamados izquierdistas que se incorporan al sistema para cambiarlo desde dentro.

Una forma es la que aplican Venezuela, Ecuador, Bolivia… Avanzar con decisión en una política independiente asumiendo los riesgos de la desestabilización interna y externa pero sin desconectarse de la economía mundial y su modo de producción y consumo insostenibles. Financiándose con ventas de recursos al mercado irracional de los capitalistas.

Otro modo es levantar lentamente una fuerza sin integrarse al orden existente. Proponiendo una sociedad de base material sostenible, planificada, racional. Una corriente de discurso consecuente desde ahora con el colapso futuro a la vista, que no oculte la posibilidad de un mundo fascista sin freno de los empresarios globales y sus servidores acomodados. Es el caso de Cuba.

Actualmente la única forma de llegar a ser gobierno es la primera, con medidas de justicia popular al lado de privilegiados millonarios y la continuación de la ideología del consumo y del crecimiento infinito.    

Lo que diferencia uno de otro método es la cercanía o no en el tiempo para ser gobierno.

Sin embargo quizás lo verdaderamente pragmático es trabajar directamente por el socialismo planificado, sin empresarios depredadores del hombre y la naturaleza, con bienes racionados y recursos sostenibles, en lugar de confundirse en una población que cree en la publicidad liberal y que en cualquier momento abandonará el proceso hacia la civilización de nuevas formas de vida.  

Un socialista fiel al objetivo que transa entregando más autos, créditos, modas, viajes, lujos, aceptando pobres protegidos junto a ricos que explotan, necesariamente debe ocultar lo que sabe vendrá, es decir manipular, mentir, gobernar desde arriba. Repetir la dictadura sobre el pueblo.

Se puede partir de los árboles torcidos o de la semilla que necesitará tiempo para crecer recta.        

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